miércoles, mayo 18, 2005

Contra los que lo dejan todo para el último momento

Esas que cuando eramos estudiantes se quedaban a estudiar indefectiblemente hasta las seis de la mañana aunque el examen comprendiese cinco folios. Esas que tomaban cafeteras enteras por párrafo, esas, has crecido y se han vuelto peores.
Yo es que siempre he sido de las que me organizaba como si fuese el jefe de protocolo de la casa real en plena boda de leti princess. Me ponía mi horario de estudio perfectamente medido (incluía algua tarde extra por si surgía un imprevisto) y lo cumplía a rajatabla. Así mientras las demás empezaban a estudiar yo ya estaba repasando y cuando se quedaban en vela antes de que les preguntasen la tabla del uno, yo dormía a pierna suelta. También he sufrido noches en blanco pero sólo cuando era cuestión de máxima necesidad, porque estoy segura de que esta gente (que es mucha) que siempre lo deja todo para última hora es que les mola el rollo: "Tía, me ha pasado toda la noche estudiando, he dormido 32 minutos y me he tomado 60 tazas de café, estoy agotada... y no me se nada"....
Bien, esas mismas no han cambiado en absoluto con el paso del tiempo. "Tengo que entregar la catedral de Santiago hecha en trenzado de pestañas de virgen noruega".... Ante tal obra deciden no ponerse manos a la misma hasta el día antes de la fecha de entrega y, ese día, se levantan a las diez de la mañana! y se van al tajo ya predispuestas a montar su espectáculo preferido. EL primer paso es ir vestida para la ocasión. Aunque a las diez de la mañana no están estresadas y han dormido al menos nueve horas se ponen unos pantalones viejos, camisola amplia, playeros, jersey-padre, y el pelo recogido en una coleta como me-la-he-hecho-mientras-tecleaba-con-un-boli-sujeto-por-la-boca.
Después empieza el espectáculo: nada de utilización inteligente del tiempo, ni de economía de recursos... aqui estamos dispuestas a pasarnos dos horas eligiendo el tipo de letra porque lo que mola es hacer que se trabaja mucho, que se está muy agobiada y todo es muy duro. Por supuesto hay tienes que fumarse aproximadamente tu peso en cigarros... abandonar constántemente tu puesto para ir a por cafés (da igual que eso rompa tu ritmo de trabajo) y no comer... o comer de una forma que te permita decir luego frases como: "Me he comido media loncha de mortadela que estaba calzando la mesa entre calada y calada porque no tenía tiempo para bajar a la cafetería, ni para girarme y articular a un compañero que me suba un sanwich, ni para levantarme a las ocho y preparme un tenteempie, ni, por supuesto, para dejar de fumar"...
También es necesario resoplar mucho y quedo el mundo oiga nuestras quejas y, fundamental, irse los últimos (aunque ya hayamos terminado)... porque, juro que esto es verídico, yo he visto a una persona a las doce de la noche haciendo este show y al asomarme a su ordenador comprobé que estaba cambiando sin parar el título de su texto de cuerpo 24 a 30 para ver cual quedaba mejor.... ¡y llevaba una hora así! (yo creo que estaba esperando a que yo me fuera)
El colofón final es que despeinada, con ojeras y aliento a mono muerto en una cárcel turca la tía va y te dice: "Estoy que me muero pero tengo una fiesta de untarse aceite en bolas en un barco que recorre el mediterráneo durante cuatro días sin dormir. No me apetece nada, pero tengo que ir así que...."--"¿Y la muralla china con motas de polvo que tienes que entregar dentro de cinco días?"---"Va!, ya lo haré cuando vuelva... que ya he trabajado hoy bastante". Amén.

Por supuesto en este post (que escribo proque, como dice un amigo, vivo instalada en el odio) no me refiero a las perris freelances y perristrabajadoras en casa... que nos pasamos una semana mirando como crece la capa de polvo de nuestros ordenadores y derepente nos encargan tres torres petrones para antes de comer.

7 Comments:

Anonymous Anónimo said...

pues a mi me gusta dejar las cosas para el ultimo momento como cuando me como por ejemplo un plato que siempre dejo para el final las cosas que mas me gustan

11:10 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Perri, te adoro. Qué sabias palabras y con qué gracia.

Venía yo pensando desde hace poco tiempo que hay gente que necesita de la imprecisión para sobrevivir y que la fomentan e intentan hacer de su vida un caos por puro aburrimiento. Y creo que esto es de lo que hablas. No se trata de vaguería, no, va más allá, es necesitar convertir la propia vida en torbellino a base de imprecisión.

Este fenómeno llega a su culmen en el mundo de las organizaciones no gubernamentales (que encima están y son para ayudar a los demás), al socaire de los muchos viajes teóricamente altruistas y estoy segura de que se refleja meridianamente en las cuentas de resultados de cualquier entidad, pero aún no se sabe qué tanto por ciento atribuirle.

11:48 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Aguadora, realmente has llegado al meollo de la cuestión en una sola y exacta frase que explica mucho mejor lo que yo he intentado exponer: Necesitan convertir su vida en un torbellino a base de imprecisión por puro aburrimiento. Esto último (el aburrimiento) creo que es kit (quiz, quit, nunca he sabido como se escribe) de la cuestión.
Luego hay psicópatas como yo que necesitan el orden, aunque me considero bastante flexible en comparación con otros especímenes (con los que he intentado ajustar agendas)

1:05 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

dios! ni te imaginas lo que me ha recordado tu comentario a alguna gente que conozco....

Estoy de acuerdo en que lo hacen por puro aburrimiento o quizás porque sus vidas carecen de mucho sentido e intentan "llenar" ese hueco haciendo de su vida un puro sufrimiento... El problema comienza cuando también te arrastran a tí y es que puede ser peligroso darte cuenta un día que empiezas a discutir por ver quién lleva la vida más perra y sufridora de este planeta...... y ese es el error que no puedes cometer...

1:33 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

ajjajajajaj... perri, sencillamente genial. Menos mal que has incluido el último parrafo, haciendo mención a las freelance y perristrabajadoras en casa, entre las que me incluyo.

He trabajado durante unos años para la universidad. Mu bien pagao (aunque parezca mentira). Dos meses viéndolas venir, y de repente miles de articulos en una sola semana Y RAPIDITO, QUE SI NO NOS PUBLICAMOS!!!!... jajajaj... que bien me lo pasaba. Menos mal que vivo sola.

Yo, por deformación pofesioná, no tengo horarios para comer, ni dormir, ni currar. Ki icir: estoy currando a gustito... me dan las 4 de la mañana. No problem. Con cinco horitas de sueño, como nueva. A las 9 arriba. Curro. A las 12:30 como. Relax. Café. Curro. Gymnasio (el unico horario que respeto), y curro. Duermo poco desde hace muchos años, y creo que mi capacidad de trabajo -o sufrimiento- es mayor cuanto mayor es la presión. Masoca? pos a lo mejon. Lo unico que te puedo asegurar es que no me quejo.

4:30 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Lore, bienvenida al perriblog!!!!!!!!!! Mir, los architectos es que desarrolláis la capacidad de poder trabajar sin límite casi en cualquier condición, pero lo vuestro es caso a parte porque no es algo artificial o pretencioso... tengo muchos amiguines architectos y ninguno duerme más de seis o siete horas al día

6:56 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

jajajaja... claro... ¿por qué soy arquitecto?
1)porque el látigo y la cera caliente en el pecho ya me aburrían

2)porque me gusta oir el mismo cd 80 veces seguidas la misma noche

3)porque me encanta cenar cuando veo amanecer

4)porque una vez leí que palmas si pasas 72 horas sin dormir... y necesitaba comprobarlo... no quería desperdiciar 8h de cada día de mi vida durmiendo

5)Porque dudaba entre alistarme a la Escuela de Arquitectura o la Legión y me dan miedo las cabras.

6)Porque me encanta usar las carpetas kingsize como armas para apartar gente en los autobuses.

7)Porque de algo hay que morir, y como no fumo...

8)Porque quiero quedarme ciega para ser pensionista

9)Porque cuando me cruje la columna suena la macarena.

10)Y porque yo lo valgo ta-ka-tá (<---- zapateao con maríaisabeles)

7:39 p. m.  

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