martes, septiembre 27, 2005

¿se puede echar de menos algo que no se tiene?

Me siento como si echase de menos la falda de la vecina o el perro del portero. Como si una ola de nostalgia me invadiese al darme cuenta que mi compañero de mesa se ha llevado el juguete con el que decora su ordenador. Triste porque el autobusero ha perdido su reloj favorito. Como si añorase las vacaciones en Malta que nunca he tenido o la vespa que no conduzco. Algo así como si recordase un maravilloso amigo que vive en Londres, al que le gusta hacer treking, cold play y no existir… ¿se puedo echar de menos algo que no se tiene… o lo que se echa de menos es la sensación que la ensoñación de que en realidad se tiene nos deja?

¿Debo dejar de leer a Tolstoy y calzarme las magníficas botas de mosquetero que me he comprado con el dinero que tenía reservado para comida y papel higiénico?

7 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Albert Pla lo explicaba muy bien en Supone Fonollosa (1995):

Añoro

Añoro todo lo que no tuve
lo que tuve retuve
y eso no me lo quita nadie

Añoro sólamente
lo que no vi ni en pintura
lo que no quise que ocurriera
lo que olvidé por desidia
lo que no escuché por ciego

hecho de menos
me hace falta
lo que no viví ni en sueños

añoro por ejemplo
no haberme follado a Marta
pensando mientras tanto
que me follaba a su hermana

y añoro a esa muchacha
que jamás he conocido
que espera ansiosamente el amor mío

Y esa rayita y esa pastillita
que no tomé contigo
aquella noche

me duelen los recuerdos
por no haberte conocido
ni amado ni violado
en un confesionario
quién pudiera haber gozado
de la luna y de tus besos
en aquel acantilado
dentro de un cadillac rojo
y por cierto ...

se me olvidaba decir
se me olvidaba decir
se me olvidaba decir
lo que vine a pedir
si quieres bailar conmigo
esa canción tan bonita
aun no existe todavía
pero es mi canción preferida

ye, ye, ...

Estoy triste voy de luto
como si se hubieran muerto
esos seres tan queridos
que son mis enemigos

Me duele la cabeza
no me quito la resaca
y eso que ayer me quedé en casa
No tomé ni una copita
ni tampoco maté a nadie
y eso que hay quien lo merece
por pereza o por cobarde
nunca quise a nunca pude

y añoro esos zapatos que no tuve
mis pies pisan descalzos
pues yo siempre ando desnudo

y eso que nunca me pinté
con purpurina todo el cuerpo
ni me subí a ese campanario
pa gritarle al sol y al viento:

Me cago en la madre que parió a esos
mamones chicharelos que me están
chingando la existencia

y por cierto ...

se me olvidaba decir
se me olvidaba decir
se me olvidaba decir
lo que vine a pedir
si quieres bailar conmigo
esa canción tan bonita
aun no existe todavía
pero es mi canción preferida

ye, ye, ...

y añoro no haber muerto cada ida
cuando llegue la muerte
ya no sabré que hacer con ella
a lo mejor la palmo
y resucito siendo un cerdo
me olvido de que existo
y así no echaré nada de menos
engordaré deprisa
en el corral de las mentiras
comeré lo que me echan
como cualquier cerdo bueno
hasta que un ida el granjero
me se lleve al matadero
y convierta en embutidos
mis recuerdos más grasientos

entonces piensa en mí
recuérdame amor mío
cada vez que te tomes
una tapilla de chorizo

ye, ye, ...

9:41 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Pessoa dijo lo mismo con más acierto, mediante la voz de Álvaro de Campos.

PECADO ORIGINAL

Ah, ¿Quién escribirá la historia de lo que pudo haber sido?
Esa ha de ser, si alguien la escribe,
la verdadera historia de la humanidad.

Lo que hay es sólo el mundo verdadero: el mundo sin nosotros.
Lo que no hay somos nosotros, y la verdad está ahí.

Soy aquel que nunca acerté a ser.
Todos somos lo que nos supusimos.
Nuestra realidad es lo que no hemos podido conseguir.

¿Qué ha sido de aquella verdad nuestra –el ensueño en la ventana de la infancia?
¿Qué ha sido de aquella certidumbre nuestra –el propósito en la mesa de después?

Medito, reclinada la cabeza sobre las manos sobrepuestas, apoyadas
en el alféizar del ventanal del mirador,
sentado de lado en una silla, ya después de cenar:
¿Qué ha sido de mi realidad, que sólo tengo vida?
¿Y qué ha sido de mí, que soy sólo el que existe?
¡Cuántos Césares fui!

En el alma, y con alguna verdad;
en la imaginación, y con alguna justicia;
en la inteligencia, y con alguna razón,
Dios mío, Dios mío, Dios mío,
¡cuántos Césares fui!
¡Cuántos Césares fui!
¡Cuántos Césares fui!

3:41 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Pues yo echo mano de Los Planetas.


PARTE DE LO QUE ME DEBES

Cuantas veces lo intenté.
Y no sirvió de nada.
De un millón de formas lo intenté.
Y no sirvió de nada.

¿Lo has sentido alguna vez?
¿Echas de menos algo?
¿Te has arrepentido alguna vez
de haber tenido y de no haberlo dado?

¿Has vuelto de nuevo allí?
¿En qué has pensado?
No te has acordado más de mí.
Que yo no he conseguido nada a cambio.

A veces pienso en lo estúpido que fui,
las fuerzas que gasté, el tiempo que perdí.

A veces pienso en lo estúpido que fui,
las fuerzas que gasté, el tiempo que perdí.

Ahora pienso en lo estúpido que fui,
las fuerzas que gasté, el tiempo que perdí.

3:55 p. m.  
Blogger Carmen Mañana said...

Jo, perris... muchas gracias, me han encantado vuestras colaboraciones, me han encantado...

4:03 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Va a estar tocando esta canción mientras mi ex se de cuenta por fin de cuánto que ma herido.

5:54 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

(me refiero a la de Los Planetas).

En cuanto al post original, creo que has de ser la versión española de mí :( (soy guiri).

Suerte

6:05 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Buenas frases

12:57 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home