miércoles, junio 15, 2005

Mujeres acosadas

Queridas perris (y perros)... el post de ayer dio lugar a un spin off (como diría un señor que odia que lo nombre): ¿por qué las mujeres tenemos que aguantar ciertas cosas por el hecho de no tener pito? y, sobre todo, ¿qué hacer para planterles cara sin acabar con ella rota? (leer los commets de Aguadora y Campanilla de ayer).

El domingo pasado tres chicas guapas, inteligentes, profesionales bien remuneradas que saben lo que quieren y yo estabamos tomando el airecito rico en la plaza de San Andrés y La Paja. Porque sí señores, lo que hacen las chicas guapas inteligentes y bien remuneradas profesionalmente un domingo por la tarde no es pasear al calor del atardacer con unos chicos guapos e inteligentes, ni siquiera recuperarse físicamente del encuentro susuarrrrrrrrr con chicos guapos e inteligentes (o simplemente chicos si son heterosexuales). Lo que hacen las chicas guapas, inteligentes y bien remuneradas profesinalmente un domingo por la tarde es tomarse una cocacola juntas.

Bueno el caso es que estábamos todas juntas (las cocacolas, las chicas guapas inteligentes y bien remuneradas y yo). Tan tranquilas, criticando cual hienas hambrientas, intentado esquivar el síndrome de domingo. Entonces dos tios plastas y puestos de distintas sustancias, primero uno y después otro, nos obligaron a levantarnos de nuestra pequeña parcela de suelo y cambiarnos de sitio: ¿os amenazarón con un chucillo jamonero oxidado?, me preguntaréis. La respuesta es no. Lo que hicieron fue ponermos violentas diciendo estupideces, sentándose tan cerca que podíamos contarles los muchos pelos que tenían en la nariz y tocarnos (sin propasarse pero lo suficiente para que te apetezca sacar un machete y cortarle las manos al más puro estilo coránico).

Nos cambiamos de sitio dos veces y luego nos fuimos. Enfadas, cabreadas e impotentes. ¿por qué tenemos que irnos nosotras si eran ellos los que nos estaban molestando? ¿qué podíamos haber hecho en vez de clauidicar e irnos (diré que estaban tan puesto que una reacción semiviolenta no hubiese sido extraña)? y ¿por qué de entre toda la gente que había en la plaza se acercaron precisamente a nosotros?.....
....¡Porque eramos el único grupo de chicas solas de toda la plaza! ¡Sólo por eso se atrevieron a tocarnos los cojones!

El caso es que sientes que esa gente (y mucha más) cree que tiene el derecho de dar rienda suelta a sus perversiones y que nosotras tenemos que aguantarlo solo porque somos mujeres y ese es nuestro deber... parece que te consideran inferior... ¿pero que puedes hacer sin acabar con un cascote de cerveza en la garganta?

No lo se, pero si se lo que mi mente perri imaginava mientras pasaba todo eso: pensaba que era como Uma en Kill Bill que sacaba mi patada voladora y les hacía vomitar todas las pastillas que se habían metido de golpe y luego les obligaba a volver a comérselo con mis manoloblanick de dominatrix... al fin me despedía con un golpe de melena: wash, wash y me iba mientras sonaba Where do we go? de los Guns and Roses.

En fin que podéis utilizar estos comments para contar situaciones odiosas como la de Campanilla y que haríais para vengaros. Yo, personalmente, cuando me pasan cosas parecidas en el metro utilizo el pisotón de hipopótamo obeso combinado con sonrisa soy-una-zorra-y-lo-se-pero-tu-eres-peor-y-los-dos-lo-sabemos.

13 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Para empezar, espero que sólo tengas unos Blahniks en tus mejores sueños de perri-vengadora, porque de lo contrario, te arrancaré los pies a bocados...

Todas hemos pasado situaciones de esas. Incluso PEORES. Tengo una especialmente jodida que, para no jorobar el clima "de humor" de la perrera de mi perri, obviaré, pero desgraciadamente es más habitual de lo que parece.

No sé si ya he contado por aqui alguna anécdota con los "operarios" (que los arquitectos somos asins de fisssnos, y no los llamamos albañiles) con los que he trabajado a diario. Imaginate llegar a un edificio en construcción de unas ocho plantas, y que solo porque tus tetas sobresalen de tu caja torácica, cuarenta "..." (<---- rellenar con el adjetivo calificativo que más os guste) se ponga a GRITAR burradas. Afortunadamente, cuando te pones el casco y ven quien eres, todo parece calmarse, al menos en lo que a decibelios se refiere.

Recuerdo un día que volvía del trabajo (cuando, oh, bendita fortuna, aún trabajaba) con mil cabreos hirviendo al mismo tiempo: el casero, el jefe, los operarios, el constructor, la madre que los parió a todos ellos... y un operario, de una obra que había en C/Sierpes (cogollo sevillano)me dice al pasar "vayah tetah tieneh, jamia...". Todo hubiera quedado ahí si no hubiera sido por mi pre-calentamiento cerebral y porque él lo dijo en plan "me he comprado un megáfono".

Me giré, me quité las gafas de sol y le dije "eres un auténtico gilipollas, imbécil". El tio se puso rojo al principio, y blanco después. Según me alejaba escuché al resto de operarios "killaaahhhh, no te pongah asinnnn...".

Reconozco que mis tetas no pasan inadvertidas -y no es por ponerme estupenda- es solo por "la talla", pero he decidido morir con ellas.
Antes me callaba por vergüenza. No sabía reaccionar. Ahora ya no me callo. Si tengo que mandar a alguien "al congo", lo mando, y me quedo "tan agustitooo-o-o-oooo" (<---- el marido de la Jurado dixit)


Me gustan estos corolarios (o spin off). Estás muy productiva perri. Yo voy a colgar el cartel de "no hay posts hasta septiembre", empiezo a estar a full con el project. Eres mi valvulita de escape. No pares.

4:39 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Lo peor de este tipo de cosas es que suceden todos los días. Cafelín matinal: camarero te mira a las tetas que tú, por lo demás, ni siquiera llevas en escote; pasas por obra siguiendo el camino al trabajo: descuelque de obreros al estilo pole-dancer por los andamios; pasas por El Prado y hay uno regando que hace como que te moja los pies (o directamente te los moja); uno te canta algo soez según pasas, otro intenta chocarse contigo. Todos los putos días.

Al final del día, puff, qué queréis, una se siente como un objeto que pertenece a la galería y a mí, sinceramente, se me está acabando la paciencia.

4:44 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Mir, acabo de leer tu comentario. Yo pasé por la fase verbal -creo que tengo unos diez años más que tú-. También he soltado algún bofetón -me apodaron Miss Tyson- en vez de apodar al que me tocó el culo Mr. Lamo [Sr. Cutre]. Ahora creo que lo que me pide el cuerpo es un bazooka o un combo uzi-espada.

Un día de estos me veis en el Qué!

5:02 p. m.  
Blogger Carmen Mañana said...

Nos están llamando a la revolución!!!! basta ya!...tienes razón aguadora... como dice mi adorado Marín... no cargue usted la barca señor Zaplana!... es hora de tomar las armas! quiero venganza! quiero ver como piden perdon, como meten sus rabos aún más entre las piernas hasta que desesaparezca (aún más)... ¡Yo no me puedo quedar con esta ira dentro!

5:33 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

jajajjaa... aguadora jajajaj... espero no tener que llegar a la fase bazoka. de todos modos, yo ya no me asusto por nada... Después de haber recibido ofertas de trabajos/becas por mi "contonno pestoral", yo ya me espero lo que sea... pásame el manual de instrucciones, aguadora... el del bazoka digo... ainss...

8:54 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Por cierto perri, esta tarde ha estado blaelita en mi "solución habitacional" y le he enseñado la perrera. Se ha partido el pecho, ha leido un montón de tus posts, y creo que tienes una nueva fan.

En cuanto su ordenador se recupere del parto de su pfc, seguro que aparece por aqui.

8:56 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Este blog empieza a darme miedo...

2:20 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Un día, al poco de empezar en mi actual trabajo, una compañera dejó caer que los jefes no veían con buenos ojos la ropa provocativa. Yo pensé que exageraba, que sacaba de madre la ideología de la empresa... Pero poco a poco me dí cuenta de que el look "froilainmaría" es mayoritario en la redacción. Y tantas mujeres a la vez no pueden elegir ese estilo tan antiestético voluntariamente, a no ser que se trate de una reunión de numerarias. Bueno, no todas mis compañeras visten así, ¿eh? Pero muchas, sí.

No es que yo sea partidaria de ir a trabajar en microfalda y taconazos, para nada, pero por si acaso estoy autocensurando mis camisetas (solo me pongo las de sisa, los tirantes los he dejado para los fines de semana).

Y, a pesar de todo, aún así, los jefes cerrrrrdos y vieeeeeeeeejos se dirigen a mí con la misma mirada que tenían el domingo los chungos colocados de perri, o en su día los operarios de mir, solo que su represión (o hipocresía) no les deja soltar burradas en voz alta.

Y los días que estoy de bajón, SPM y esas cosas, cuando llega la hora en que los jefes se pasean por la redacción soltando esos piropos de viejo verde de derechas tan machistas, quiero volverme invisible. O empuñar un lanzallamas.

De momento, he adoptado una actitud de despiste, en plan "¿Qué me dice este viejo tan amable? Ah, sí, encantada de conocerle, caballero, uf, tengo muchiiiiiiiiisimo trabajo". ¿La siguiente fase será empezar a usar camisetas de colores ocres y tierras, zapatos de monja, faldas de largo indefinido? ¿O salir en el Qué! al lado de Aguadora?

2:34 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Anómalo, no sé por qué te tiene que dar miedo. Lo que debería darte miedo son los tíos. Basta con que te imagines que llegas nuevo a una cárcel y vas pasando por un pasillo... así, todos los días de tu vida.

¿Tienes miedo de nosotras?

12:05 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Hum... no, los tíos no me dan miedo. No en conjunto. A lo más, Rappel cuando anuncia que va a la piscina. Y Fraga, cuyo conocimiento de la Fuerza es vasto como él sólo.
¿Por qué no hacéis las tipas como los tipos? Supongo que porque nosotros nos lo tomaríamos en serio, ¿no? XD

12:33 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Sí que eres anómalo, sí.

5:40 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Si que damos miedo a veces:

" Algo más que fútbol. Así es como ve Lennart Johansson, presidente de la UEFA, el balompié femenino. El sueco ha insunuado a las claras que las chicas deberían hacer uso de sus 'armas de mujer' sobre el terreno de juego para atraer a los patroncinadores. "Deben promover su encantadora imagen mediante prendas ajustadas y sudorosas", declaró. Las internacionales suecas ya han criticado estas afirmaciones".

11:04 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

cuando voy a denunciar que han entrado en mi casa y me han robado el bolso con todos los documentos...tarjetas...dinero y efectos personales...no pasa de la puerta la policia...solo se limitan a preguntar a mi hijo que salio a ver que pasaba si se creia o no lo que denuncié.

mi hijo que no está en el mundo con los examenes, les dijo que no.

ahi se acabo la investigacion policial...ni huellas...ni discurrir que la persona que entro nos controla tanto a los dos que...sabia que habia sacado dinero y lo tendria en el bolso...que ,mi hijo salio a estudiar a la universidad por los examenes...y que yo dormia como un tronco.
es normal que una persona nos acose a diario asi?? y etc.etc.etc...
pero los hombres siempre protejen a los hombres hagan lo que hagan....solo se aliña con un poco de hilaridad y hasta que o hay sangre y sales en tv. no se hace cargo de la violencia de genero nadie.

8:47 p. m.  

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