miércoles, febrero 23, 2005

nievaaaaaaaa

he abierto los ojos y, al sacar la mano de debajo de las mantas para levantarlas, mis falanges se han crionizado y mi instinto de supervivencia, haciendo caso omiso de las pulsiones cerebrales que ordenaban al cuerpo levantarse, le ha obligado, en un movimiento brusco, a esconderse entero bajo el edredón. Era tan feliz en mi pequeña cueva: calentita, en posición fetal, sin preocupaciones... ay¡ Por la ventana los techos de los coches y de las casas están nevados... también las ramillas de los arbolinos. Es tan bucólico y pastoril.

Hoy es un día perfecto... para todo menos para tomar el sol en bolas e ir a la peluquería. Y esto último es lo que voy a hacer yo: porque ya he pedido hora y porque con estos pelos no puedo entrevistar a las pijis de las marcas de cosméticos que tengo que entrevistar. Así que otra vez mi instinto, en contra de lo que dicta mi cerebro, ha decidido que no importa que haga menos dos grados en la calle, que las aceras estén resvaladizas y, sobre todo, que mi pelo parezca una patata nada más salir de la peluquería. Iré. Ya veis que a mi el cerebro parece que sólo me sirve ultimamente para ocupar hueco y que el peinado no se me hunda hasta las cejas...

Os cuento.

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Tu picahu feto está vivo? Estoy preocupado por él. Con tanta nieve no hago más que ver al calvo de la Lotería en todas las esquinas. Te imaginas que volviera otra vez la navidad? Argggggggggggg!

8:49 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

"resvaladizo" va con B, como pueBlerina, que no proVinciana.
Ahora cualquiera te monta un blog.

5:37 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

De pueblerinos está lleno el mundo guapo, empezando por ti...hay q joderse!!!

6:28 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home